Gentileza DTM-Spain Edoardo Mortara ha conseguido su segunda victoria de la temporada en el circuito de Zandvoort en una carrera caótica. El piloto del Audi Sport Team Rosberg ha conseguido sobreponerse a las dificultades de una carrera de supervivencia para alzarse con el triunfo por delante de Mike Rockenfeller y de Mattias Ekström. De esta forma Audi ha conseguido su primer triplete en 2012 en una carrera que de nuevo a vuelto a agitar la clasificación general del campeonato dejándola más apretada para las tres pruebas que faltan.
La carrera de Zandvoort ha tenido todo lo que puede querer un aficionado. Condiciones meteorológicas cambiantes, adelantamientos, errores, toques y salidas de pista y mucha dosis de emoción. Audi partía con una posición privilegiada ya que hasta cinco de sus pilotos estaban en las cinco primeras posiciones pero poco a poco esto se fue desgastando aunque la marca de Ingolstadt mantuvo la compostura.
En la salida Timo Scheider se quedaba totalmente clavado perdiendo hasta dieciocho posiciones y dejando como líder a Mike Rockenfeller. Por su parte Gary Paffett ascendía hasta la quinta plaza desde la octava y Miguel Molina sufría un fatal toque con Robert Wickens que le llevaba a abandonar después de quedar atrapado en la puzolana con trompo incluido. Pocas curvas después el propio Robert Wickens recibía el toque de Christian Vietoris y también con un trompo veía como ambos tenían que abandonar.
Todos estos incidentes provocaron el primer Safety Car de la jornada, que pocas vueltas después de su marcha se vió acompañado por una nueva aparición por culpa del capó de Timo Scheider, que ante la presión del viento en la delantera de su Audi A5 DTM reventó en mitad de la recta de meta. Una vez que la calma volvió a pista en la vuelta 11, los pilotos comenzaron a hacer sus primeras paradas. Pocos cambios hubo en las detenciones en box ya que la mayoría de los pilotos de la cabeza realizó una estrategia de dos paradas muy juntas, pero cuando todos habían terminado de hacerlas la lluvia hizo acto de presencia en Zandvoort provocando las dudas entre los equipos. Todos los pilotos se mantuvieron con slicks casi por obligación a pesar de la lluvia y desde ese momento la carrera comenzó a dar un vuelco terrible.
Martin Tomczyk tocó a Gary Paffett en la curva Tarzan al intentar adelantarlo lo que provocó el abandono del piloto de BMW, que se unió así a la lista engordada vueltas antes por David Coulthard, provocando un trompo del piloto británico y la salida de pista de Filipe Albuquerque al esquivar el Mercedes del líder del campeonato. El propio Filipe tuvo que abandonar cuando marchaba en la séptima posición y desde ese incidente hasta el final de la carrera la tensión se mantuvo por todo lo alto.
Edoardo Mortara adelanto a Mike Rockenfeller poco después y desde ese momento el piloto italiano se mantuvo firme en la primera posición con un margen de un segundo hasta la línea de meta, cruzada por límite de tiempo y no por número de vueltas. Mike Rockenfeller perdió así la oportunidad de conseguir la victoria y tuvo que conformarse con la segunda posición por delante de su compañero Mattias Ekström, que llegó en tierra de nadie para cerrar los puestos de podio.
Jamie Green que adelantó a Adrien Tambay fue el mejor piloto de Mercedes en la cuarta posición. Por su parte, el francés que fue quinto hizo una carrera muy consistente con el Audi A5 DTM y consiguió superar a Bruno Spengler, que fue sexto. El canadiense de BMW remontó desde la posición decimoctava hasta la sexta aprovechando los abandonos y problemas de los rivales y compacta así el campeonato aún más gracias a la posición más retrasada de Gary Paffett.
Un Gary Paffett que llegó a marchar undécimo pero que en unas vueltas finales donde se la jugó al todo o nada consiguiendo una séptima posición tras adelantar a Dirk Werner, a Augusto Farfus en una maravillosa maniobra y a su compañero Ralf Schumacher. Dirk Werner fue finalmente el octavo en una gran actuación y Augusto Farfus y Ralf Schumacher completaron la zona de puntos de esta alocada carrera.
Con el abandono en la primera curva de Miguel Molina, Roberto Merhi con su Mercedes AMG C-Coupé se quedó con la responsabilidad de mantener alto el pabellón español y realmente lo consiguió. Tras una mala salida donde llegó a ocupar la última posición, aprovechó las resalidas tras el safety car y los problemas de los rivales en una estrategia radicalmente distinta a la del resto de pilotos para ascender a la decimoprimera posición. Tres décimas fueron las que separaron a Merhi de Ralf Schumacher y por esta distancia el piloto castellonense no ha sumado su primer punto en el DTM al terminar undécimo en la que ha sido su mejor carrera sin duda desde su debut a principios de temporada.
Fuente DTM-Spain
No hay comentarios:
Publicar un comentario